Fue en diciembre del año pasado que la banda Los Pulpos de Trujillo empezó a sonar en los medios chilenos. Un residente peruano que tenía un emprendimiento de comida casera en Recoleta, denunció a la PDI que estaba siendo víctima de extorsión por una banda que lo amenazaba a través de mensajería de texto con hacerle daño a su familia si no pagaba $1O millones.
Los Pulpos volvieron a ser noticia en febrero de este año, luego de que uno de sus miembros participara en una pelea en una fiesta en Independencia donde resultó una persona fallecida.
En Perú, de donde son originarios, son conocidos como Los Pulpos de la Cruz Verde. Se trata de una banda criminal dedicada a las extorsiones, secuestros y sicariatos. Según el diario "La República" fue fundada en la década del 90 por cuatro hermanos, de apellidos Cruz Arce, quienes formaron "uno de los imperios criminales más peligrosos y sanguinarios" del país vecino. Su líder actual, según el gobierno peruano, escogió Chile como escondite y base de operaciones, instalando su técnicas delictivas en los barrios de Santiago Centro, Recoleta e Independencia.
Fue precisamente una de las víctimas de extorsión de esta banda, quien esta semana alertó a la Brigada de Investigación Criminal de la PDI, sobre otro hecho delictual vinculado: que personal de Carabineros también lo estaba extorsionando a cambio de protección. Es decir, que algunos carabineros estaban imitando las prácticas de Los Pulpos.
Pulpos de verde
Tras la denuncia, la PDI realizó un operativo y detuvo en calidad de flagrancia a dos cabo segundo de la Sección de Investigación Policial (SIP) y a un ex carabinero, quien había sido dado de baja por conducir en estado de ebriedad en marzo de este año.Los tres detenidos fueron formalizados por amenazas no condicionales y exacción ilegal, es decir, el delito que comete un funcionario público cuando exige beneficio económico por ejecutar una acción que le corresponde realizar como parte de sus funciones y con el deber de realizarlas. Además, el ex funcionario fue formalizado por cohecho y tenencia ilegal de armas.
La tarde de este miércoles, durante la audiencia de formalización, el fiscal Luis Isla, de la Fiscalía Centro Norte, leyó la declaración de la víctima, el dueño de locales gastronómicos de Independencia.
"Me dedico a este rubro hace tres años. Me he visto expuesto a amenazas de distintas personas, las cuales solicitan dinero para dejarme trabajar. Lo que hacen es concurrir a los locales y bajo amenazas con armas o de incendio, solicitan dinero, lo que ellos llaman cupo . Esto lo hacen principalmente banda de ciudadanos extranjeros en la comuna a distintos comerciantes, pero nadie se atreve a denunciar porque son personas muy peligrosas".
"Yo solamente tenía información de que estas acciones las realizaban las bandas de delincuentes, pero hace una semana recibí un llamado de WhastApp de una persona que me dijo que sabía a lo que yo me dedicaba y que si quería trabajar tranquilo me podía ayudar. Se identificó como de Carabineros y me indicó conocer a los carabineros de la unidad de Recoleta, de Santiago Centro y de Independencia, que tenía contacto y que podíamos hacer negocios. Me dijo que si le pagaba cierta cantidad de dinero trabajaría tranquilo con la ayuda de sus carabineros amigos. Pasaron unos días, y el día de ayer me contactó".
"Me dijo que me iba a cobrar $800.000 por dejarme tranquilo, que no me iban a fiscalizar. Me dijeron que si no pagaba me cerraban todo, me dijeron que si no pagaba no podría estar tranquilo. El día de hoy esta persona se comunicó conmigo y me dijo que le tenía que pagar $800.000, que había hablado con los demás y que no podría cobrarme menos. Le pregunté qué llevaba el pago de ese dinero. Me señaló que podría trabajar tranquilo como los demás y no me iban a cerrar los locales".
Flagrancia
El día martes, la víctima acordó una reunión con los uniformados para hacer el primer pago por protección. Antes de la cita, la fiscalía había solicitado marcar los billetes que se usarían en la transacción. Con el dinero marcado, la víctima se juntó con los uniformados, quienes llegaron al lugar del encuentro en un vehículo particular, marca Peugeot, de color negro. Cuando se realizó la transacción, los detectives de la PDI los detuvieron.Tras escuchar al persecutor, el Noveno Juzgado de Garantía decretó la medida cautelar de prisión preventiva para los tres detenidos.
Carabineros informó que los dos cabos segundos fueron dados de baja de la institución.