El último gran truco de Jorge Valdivia fue pasar de comentarista de ESPN a refuerzo del Necaxa de México. Este viernes, la escuadra dirigida por Pablo Guede, ex técnico del Mago en Colo Colo, anunció su fichaje con un flyer en el que, evidentemente, pegaron la cara del chileno en el cuerpo de otro jugador. "La foto fue antes de los tatuajes", bromeó el propio Valdivia en redes sociales durante la tarde. "Allá voy Necaxa, más feliz que la mierda", añadió.
El talentoso volante de 38 años regresa a la actividad después de cinco meses. Su último club fue Unión La Calera, pero la experiencia duró poco y rescindió contrato a fines de junio. En octubre dio el salto temporal al mundo de las comunicaciones, donde se desempeñó como comentarista de los programas de ESPN. Pero el fútbol siempre fue su prioridad.
"Lo sabíamos internamente hace algunos días. Jorge está feliz. Igual estaba contento como comentarista, pero al momento de saber de este interés y de ver que se confirmó, lo vi más feliz todavía. Lo veo motivado con esta oportunidad de volver a hacer lo que más le gusta, el fútbol", cuenta Claudio Valdivia, hermano del Mago.
Pese a pasar todo el segundo semestre sin club, Valdivia se mantuvo en óptimas condiciones gracias al apoyo de los especialistas de Motion Center. "Empezamos a trabajar intermitentemente hace un año, pero lo tomamos de forma constante después de que quedó como jugador libre. Planteamos el objetivo de quedar en la mejor forma física posible, de manera progresiva, sin apurar ningún proceso y considerando las variables desde nutrición, hasta kinesiología y entrenamiento", cuenta Tomás Landerer (@tomaslanderer), coordinador de alto rendimiento en Motion Center.
-¿Y cómo ve a Jorge para su retorno a la actividad, Tomás?
-Jorge venía con un par de molestias en el sóleo, por lo que la base de su entrenamiento fue recuperarse bien de eso. Enfocamos en el trabajo de fuerza y luego añadimos trabajos específicos en cancha y corriendo. Queríamos mantenerlo fuerte y hacerlo resiliente a las cargas que tendría en caso de ser fichado. Trabajó durísimo y está en su mejor estado físico desde que lo conozco. Sano, fuerte y ágil.
Valdivia, creador de clásicos arraigados en la memoria colectiva chilena como el "pero con respeto" o la finta del "espantachunchos", es la prueba fehaciente de que el talento no tiene fecha de caducidad. "Me parece fantástico su fichaje en México porque demuestra que no existen jugadores viejos o jóvenes, sino que buenos o malos. A Guede todavía le gustan los buenos, no solo los que corren. La magia no muere, no mueren los jugadores con talentos", dice Nicolás Peric, ex arquero y actual comentarista de ESPN.
"Nos cruzamos poco en el canal porque estábamos en distintos programas, pero era muy querido por el equipo. Los compañeros lo molestaban por sus camisas, floreadas y coloridas. Eso habla de su personalidad, de su alegría, de ser el alma de la fiesta, de importarle poco lo que digan los demás para poder reírse y hacer pasar un buen rato. Lo mismo que hace en el fútbol", añade el Loco Peric, otro de los extrovertidos del balompié local.
Fernando Díaz hizo debutar al Mago en la Universidad de Concepción en 2003 y en aquel entonces ya se apreciaba esa personalidad avasalladora. "Siempre fue directo y muy divertido. Incluso tenía desfachatez, se paraba en cualquier cancha, contra cualquier rival y se creía el cuento. Los genios son así, como Jorge o Marcelo Ríos. Recuerdo que conmigo estaba muy jovencito, pero entre él, Beausejour y otro más mantenían el camarín muy alegre. Previo a los partidos no había tensión; era diversión, escuchar canciones y bailar. Esa personalidad le ha servido para ser figura a nivel mundial, jugar en cualquier parte del mundo y ser buen elemento en los camarines", dice el entrenador.
"Va a encontrarse con un técnico que lo conoce y seguramente le darán descanso en algunos momentos para que pueda estirar su carrera. Pero la base de su juego, más que el físico, es el talento", añade Nano Díaz.