Agustina Toro (21) está siguiendo los pasos de su mamá, Carola Correa (46). Este viernes, la recordada chef del matinal "Buenos días a todos" (TVN), que actualmente es instructora para "activar la glándula pineal", según cuenta, presentó con orgullo a su hija en Instagram (@carolacorrea). "Es un gran ser de luz lleno de magia y sanación", escribió la cocinera, que compartió una publicación de su hija. "Descubrí a lo que me quiero dedicar próximamente y probablemente el resto de mi vida", dice (@agus.toro) en el video, dándole el puntapié inicial a sus sesiones de sanación bautizadas como Código Solar. "Lo que hago está dentro del mismo rubro de mi mamá, pero no estamos trabajando juntas. Cada una con lo suyo", reflexiona Agustina.
-¿Cuál es la influencia de su mamá?
-Es muy grande. Todos sus hijos hemos seguido de alguna forma una ruta espiritual. Ella me ha apoyado en todo. Partí atendiendo en la casa (viven en Olmué) y ella me motiva harto porque a veces da un poco de nervios partir y atreverse, pero ella está todo el tiempo animándome y diciéndome que lo voy a hacer bien y que me lance.
Cuando terminó el colegio, Agustina decidió no ir a la universidad: "Siempre estuve interesada en otras cosas. En algún momento pensé estudiar diseño, turismo o arquitectura, pero nada me motivaba realmente. Fue difícil porque meterme a la universidad era la decisión más fácil que podía tomar, pero tengo a mi mamá que me apoya un montón".
Mamá chocha
-Carola, presentó formalmente a su hija.-No tan así. Ella me pidió subir el video, porque justamente compartí un video de mi hermana que estudia medicina china y hace acupuntura. Pero yo me desmarco un poco de que es mi hija. Yo la recomiendo porque tengo la certeza de Io que ella hace y para darle confianza e impulsarla. Ella empezó hace rato y no le dije a nadie.
-Hábleme de su hija.
-La Agustina siempre fue bien especial. Ella siempre estuvo súper interesada en lo mío, siempre andamos a todos lados juntitas. La Agustina nunca quiso seguir a las masas y yo la entendí completamente. Yo estoy feliz de que ella esté feliz y se conozca a sí misma.
-¿Son muy partners?
-Sí, lo pasamos bien, aunque en la pandemia tuvimos nuestros encontrones como todos. Tenemos una relación súper abierta y de confianza, además nos gusta lo mismo. Igual a veces discutimos y le llamo la atención porque, por ejemplo, se queda dormida o para que ayude más en la casa. Es igual como cualquier mamá con su hija. Ella también me critica a mí como cualquier hija a su mamá. No somos la perfección con patas. Lo bueno es que las dos tenemos espíritu de servicio, de cooperar y ayudar, así que eso nos une mucho.