Felipe Braun cumplió 50 años el 3 de diciembre. Ese número lo hace reflexionar. "Uno es impredecible constantemente. Me encanta lo que vivo ahora y en mi familia a todos nos hace sentido, pero no tengo idea qué va a pasar en tres años más", reconoce. De lo que sí está seguro el actor de teleseries como "Machos" es que este 2020 inició una transformación en su vida. "Mucha gente cambió este año a un estilo de vida más sustentable, más apegado a la tierra y en ese sentido, ese el camino que queremos seguir mi familia y yo. Si hay algo que cambió para siempre es dar el paso y decir quiero vivir un poco mejor, quiero plantar mi lechuga, quiero entender bien los procesos de la carne, de los huevos, de mi leche, de mis quesos", plantea.
Braun habla desde su casa ubicada en una parcela entre Puerto Varas y Llanquihue, donde también tiene su mini granja. Él dejó la capital este año tras la reprogramación de un proyecto televisivo y antes de su lugar actual, se instaló en marzo junto a su esposa y sus dos hijos, Juan (4) y Agustín (7), cerca del lago Ranco, escenario donde él vivió en su adolescencia y donde residen sus padres. En junio, la familia se cambió a su hogar actual y es ahí donde viven junto a sus 23 gallinas y gallos -uno se llama José Antonio y otro Alfredo- y también con las cabras Perla y Blanca Curiosa. "Con el tiempo me he dado cuenta de los beneficios de este nuevo sur. Hay gente muy emprendedora, muy metidos en el tema de la sustentabilidad, de la preservación de animales, flora y fauna", destaca.
-¿Cómo es su día?
-Trabajo en "Factor de cambio" (su programa en 13C sobre sustentabilidad), ese es mi primer objetivo, luego voy a darles comida a las cabras y las ordeño. Después paso donde las gallinas, les saco los huevos. Mi señora ve más la huerta, yo me ocupo de desmalezar. Entremedio me hago cargo de los niños y a la hora de almuerzo les cocino. En la tarde sigo trabajando, vuelvo a ordeñar y ver a las gallinas.
-Es una combinación entre teletrabajo y naturaleza.
-Esa es la idea. Trabajar desde un lugar que me permite tener una pequeña granja. Yo no soy granjero ni me dedico a eso. Mi mundo sigue siendo entre la mezcla de la actuación y mis programas con sentido como "Factor de cambio".
Este lunes, el conductor estará a cargo una transmisión especial del eclipse por 13C que comienza a las 11 AM y donde también participará el geógrafo Marcelo Lagos, entre otros especialistas. "Voy a estar con gente que sabe mucho y esa es la gracia. Yo voy a preguntar desde la ignorancia. Voy medio fascinado y con ganas de escuchar a todos", relata.
-Su cambio se topó con la pandemia.
-Te podría decir un lugar común tipo sí, el campo es precioso , pero si soy sincero, los cambios son intensos. Yo vivo muy feliz, me encanta mirar el volcán todos los días y ordeñar mis cabras. Pero también ha sido un tema de incertidumbre de trabajo y de falta de los amigos, de la familia (por la pandemia). Entonces, siempre mirando el lado positivo, ha sido muy lindo, pero también muy angustioso. Son momentos difíciles pero menos mal nosotros hemos estado sanos, en familia y con proyectos. Ha sido do un año precioso, difícil. Todo junto, pero más para mejor que para mal. A los 50, tal vez es el momento de hacer cambios. Aunque eso le tocó al mundo entero.
Sus quesos
Felipe Braun asegura que la cocina siempre ha estado "muy presente" en su vida y hace tiempo postea contenidos gastronómicos en sus redes sociales. Hace dos años elabora quesos y otros productos como manjar. "Durante años estuve muy metido en el pan, sigo haciendo pan, pero me he metido mucho en el tema de los fermentos. Desde la masa madre llegué a los quesos, ahora estoy haciendo brie, feta y de cabra. Es parte de una investigación porque me gusta el conocimiento en la gastronomía. No he tomado clases formales ni tampoco me dedico a venderlo, voy aprendiendo todo el tiempo", explica.-¿Hacer queso es difícil?
-Sí... La masa madre también es súper difícil, tiene tiempos súper rápidos, pasa todo en 24 horas. Con el queso pasa todo en dos meses o más. En comparación, diría que la masa madre y los fermentos rápidos son más complicados porque se te descontrola muy rápido. Pero sí, el queso tiene cosas que a algunos cocineros no les gustan: tiene harto de gramos, pesas, temperatura, humedad. Es bien de ensayo y error, como en un laboratorio. No sé cuál es la clave, pero soy súper riguroso anotando qué cambié de un proceso a otro. Me encanta el momento de probar (sus quesos), además estoy haciendo mis propias pastas, también estoy cultivando mis plantitas que les pongo a estas preparaciones, como plantitas de mostaza y hago la pasta con los huevos de acá. Esta sensación de ser medio autónomo en tu alimento es un paso. Y claro, obviamente sembrar tus cosas, cosecharlas con tus hijos y tu señora, hace que todo tenga un sabor distinto.