Gaby Hernández (81 años) alcanzó a grabar la versión online de la obra "Viejas de mierda" antes de accidentarse -"muy tontamente" como describe ella- en su departamento. "Hicimos un trabajo precioso", asegura la actriz sobre el montaje que protagoniza junto a Gloria Münchmeyer y Gloria Benavides y que se estrenará vía streaming el 3 de octubre a través de la plataforma de Punto Ticket (hjL]y/3i5qCeR). "Quisimos hacer una muy buena grabación en HD y seguimos todas las medidas sanitarias que pide el Ministerio de Salud", describe ella.
-¿Cómo cuáles?
-Nos mandaron el vestuario a nuestras casas y las tres llegamos peinadas y maquilladas. Todo el equipo estaba con mascarilla y overoles de seguridad. Unas semanas antes yo armé un chat y a través de videollamadas repasamos lo textos.
Días después de esa grabación, Gaby se quebró una vértebra de la columna vertebral. "A esta edad tengo los huesos más quebradizos a pesar de que me he preocupado de consumir mucho calcio y proteínas", dice.
-¿Cómo se cayó?
-Estaba ensayando una obra que voy a hacer con el AIEP. Es muy linda, se llama "Todas en una" y mi hija me estaba grabando. Me enredé en la falda y me tropecé. Fue una caída suave, pero sentí el crack. Hace dos años me quebré la cadera. Como digo yo, a esta edad uno empieza a perder aceite. Pero no es nada grave y sé que me voy a recuperar. El doctor dijo que tengo que esperar hasta que se forme el callo en el hueso. Por suerte no pasó nada con el canal medular. Estoy en reposo relativo que significa estar en cama, pero me puedo levantar para tomar un vaso de agua, ir al baño y sentarme en otro lugar un ratito.
-¿Está con dolores?
-Hay días más molestos que otros. Tengo que usar una faja muy ajustada para mantener inmóvil la columna. Es incómodo para dormir. Chile Actores, a través del departamento de bienestar de los actores mayores, me mandó una cuidadora. Yo siempre veo el vaso medio lleno y no medio vacío. Viendo la realidad de otras personas de este país que está pasando hambre no puedo quejarme. He pasado una pandemia tranquila y privilegiada, porque he podido mantenerme con mi trabajo. Desde los 20 años soy una persona independiente.
Durante la etapa más estricta de la cuarentena, Gaby cuenta que se mantuvo conectada con su hija -María José Montero-, su nieto y sus amigas a través de videollamadas: "Me manejo bastante bien con la tecnología, si es cuestión de pinchar un botón y punto. No sé por qué hay personas mayores que se complican tanto con las cosas nuevas si esto nos beneficia tanto".