En ese contexto, Carabineros entregó detalles de una operación de un grupo especializado del OS9 que incautó una importante cantidad de municiones y drogas a exactamente 130 metros del lugar donde ocurrió la mortal balacera.
El arsenal fue encontrado al interior de un domicilio, y entre lo decomisado se hallaron 201 cartuchos calibre 9 mm, 118 cartuchos calibre .38 y 134 cartuchos calibre 380, además de un adaptador que convierte las pistolas en un fusil de tiro múltiple, miras holográficas, miras láser, un cuello antibalas y diversas drogas sintéticas y alucinógenas avaluadas en $30 millones.
El coronel Juan Francisco González, jefe del departamento OS9 de Carabineros, informó que producto de esta operación no hubo detenidos, debido a que el lugar se encontraba sin moradores, y que se estudia la teoría de que el inmueble era ocupado como guarida de bandas criminales y acopio de armas y municiones. Y destacó “el trabajo sistemático y especializado realizado por Carabineros, el Ministerio Público y la comunidad, que ha logrado detectar los lugares de acopio de peligrosos armamentos, sumado a la desarticulación e incautación de las armas que utilizaban bandas criminales activas en distintos puntos”.
La subsecretaria de Prevención del Delito, Katherine Martorell, señaló que “esta es la demostración del trabajo que se está realizando por parte de Carabineros en la zona. Había una investigación previa, estamos avanzando en esto y esperamos transmitirle a la comunidad que estamos llevándole más seguridad”. Ante los cuestionamientos por la falta de seguridad en la zona, respondió que con este tipo de procedimientos se puede apreciar que “Carabineros está ahí para evitar situaciones como la que vivimos hace algunos días”, en relación con los cinco muertos.