"Por ahorrarme el pago a una corredora de propiedades, hace unos años yo mismo puse en arriendo un departamento que tenía en Santiago Centro. Era un psicólogo y me pareció buen candidato, me dijo que trabajaba en una clínica del sector oriente, me pasó sus cotizaciones previsionales, contrato de trabajo y me pagó cuatro meses por adelantado. Pero nunca llegó a firmar el contrato de arriendo y no me pagó más. Revisando después sus papeles, eran falsos, ni siquiera trabajaba donde dijo", cuenta Juan Pablo Salas, CEO de la plataforma inmobiliaria Property Link.
Fue una muy mala experiencia que le ocurrió años antes de dedicarse al mundo inmobiliario, dice el también fundador de la empresa de administración Knockit.rent. Aprendió que al arrendar no sirven la intuición ni tener buen feeling con los candidatos. De hecho, comenta que hoy 20% de la documentación que recibe de postulantes al arriendo es falsa, es decir, los antecedentes de cotizaciones previsionales de la AFP, informe de Dicom de Equifax, boletas del Servicio de Impuestos Internos, currículum o contrato de trabajo, no son reales.
"He visto casos que hasta photoshopean hasta los contratos de la empresa donde trabajan", declara.
Jaime Ulloa, analista inmobiliario y CEO de la plataforma de venta y arriendo de propiedades Isbast.com, dice que es un fenómeno que está siendo cada vez más habitual y que, en su caso, le pasa en el 10% de las casi 1.000 postulaciones que evalúan al mes.
"Hay algunas personas que son más cara de palo y hacen hasta unas liquidaciones de sueldo en Word que se notan falsas. O presentan unas cotizaciones previsionales que las arreglan como si lo hiciera un niño, en que les pegan con Paint una fecha distinta o un sueldo diferente. Pero hay otros más avanzados en que se nota muy poco o nada, pero al fin y al cabo da Io mismo, porque al momento en que uno chequea los documentos, sale en seguida que son falsos", explica.
Lo usual es que se modifique el nombre del dueño del documento, se le cambie la fecha de emisión o se alteren los números.
Los especialistas inmobiliarios comentan que todas las instituciones que emiten documentos por internet que sirven para respaldar un arriendo, como las AFP, Dicom, Servicio de Impuestos Internos, Conservador de Bienes Raíces, entre otros, generan certificados que vienen con un número único, un folio, un código de barras o QR, los cuales se pueden verificar en sus respectivas páginas web al instante y de forma gratuita.
"Todos permiten chequearlos en línea, ingresando los números que vienen en el documentos. Una vez que se digita, se descarga el documento emitido donde uno puede ver si los datos corresponden al que te entregaron o si tiene validez el documento (si fue sacado en los últimos 30 días). Si dice que ese número no existe, es porque el documento es falso", afirma Salas.
Nelly Nunes, broker inmobiliaria de la corredora Re/Max 360, agrega que es muy fácil verificar la validez y existencia de los documentos, solo que hay que tomarse el tiempo para hacerlo.
"Y es importante hacerlo porque le estás pasando tu propiedad a una persona extraña para que viva en tu casa y es un problema si deja de pagar de un momento a otro", señala.
Ulloa agrega que el problema de arrendar a alguien que presenta documentos con información falsa de sus ingresos es que no cuenta con la capacidad o la regularidad económica para costear el arriendo de una vivienda.
"Y puede que pague el primer o segundo mes, pero habrá un momento en que ya no va a poder", dice.
También les ha pasado porque los postulantes no quieren pagar nuevamente el valor de un certificado.
"Tuve un caso de una persona que me presentó un Dicom falso, que venía con fecha de 2021 pero era de 2020. Y lo hizo porque no quería pagar los SI 6.900 que cuesta el documento, pese a que sus papeles están buenos. Pero por hacerlo, se perdió la opción de arrendar", cuenta.
Lo más clásico: el llamado
Otro paso para validar los antecedentes entregados es chequear la validez de un contrato de trabajo, liquidación de sueldo o hasta un currículum, que no son digitales.Liza Lucero, abogada de la empresa de gestión inmobiliaria Alpha Inmobiliaria, dice que Io más seguro es pedir que esos documentos estén legalizados ante un notario. Pero si no están, también se puede cotejar las liquidaciones de sueldo con el certificado de cotizaciones previsionales, ya que debe coincidir el monto imponible con lo que aparece en el las cotizaciones de los fondos de pensiones.
Nunes agrega que lo que le ha resultado mejor es llamar directamente a la empresa para cerciorarse que el postulante trabaja donde declara: "Y nos ha pasado varias veces que llamamos y no conocen a la persona. Y que no trabaja ahí, por supuesto".