Los Centros para el Control y Prevención de Enfermedades de Estados Unidos (CDC por sus siglas en inglés) hicieron una actualización sobre las formas de propagación que tiene el coronavirus. Las ordenaron desde la manera más fácil de infectarse hasta la que rara vez puede ocurrir.
Persona a persona
"El Covid-19 se transmite muy fácilmente de persona a persona", informan los CDC en su página web. Además, recalcan que el coronavirus se propaga de manera más eficiente que la influenza, pero no al nivel que lo hace el sarampión.Cantar y gritar
Si bien el coronavirus se propaga fácilmente de persona a persona, esa propagación ocurre con mayor frecuencia cuando el contacto es cercano. Según los CDC, cuando alguien se encuentra a una distancia menor a seis pies (equivalente a 1,8 metros) de un infectado, tiene un riesgo de contagio mayor a que si estuvieran más lejos."Cuando las personas con Covid-19 tosen, estornudan, cantan, hablan o respiran, producen gotitas respiratorias. Las infecciones ocurren principalmente por exposición a gotitas respiratorias cuando una persona está en contacto con alguien que tiene Covid-19", dicen los CDC.
¿Y quiénes desparraman más gotitas, los que cantan o los que hablan? El virólogo Nicolás Muena recuerda el caso de un coro en Washington en el que realizaron un ensayo de dos horas y media. De 61 personas, 32 fueron confirmadas como casos positivos.
"Estas situaciones se repitieron en Canadá, Holanda, Alemania y un montón de lados. Se hicieron estudios sobre cuántas partículas podía exhalar alguien que canta. Encontraron que una persona que habla fuerte expele más o menos la misma cantidad de microgotitas que alguien que canta", describe el investigador de la Fundación Ciencia y Vida.
Para Muena fue un hallazgo importante, sobre todo para quienes se dedican al comercio ambulante y tienen necesidad de salir a trabajar en tiempos pandémicos. "No hay diferencias entre alguien que cante en la micro o en el Metro con un vendedor ambulante que grite sus productos. Es importante que lo hagan con mascarilla, sobre todos los vendedores ambulantes que se desplazan por muchas comunas", enfatiza.
Por el aire
"El Covid-19 a veces se puede propagar por transmisión aérea", informan los CDC. Agregan que pequeñas gotas respiratorias pueden permanecer en el aire durante minutos u horas. Es el caso de los aerosoles."Existe evidencia de que de que bajo ciertas circunstancias, personas con Covid-19 infectaron a otras que estaban a más de seis pies de distancia (1,8 metros). Estas transmisiones ocurrieron dentro de espacios cerrados que tenían ventilación inadecuada", dicen.
En Alemania, recuerda el virólogo Nicolás Muena, existe un caso insigne sobre supercontagios a gran distancia. Ocurrió en Gütersloh, al oeste del país, en el matadero Tónnies, donde lograron trazar 2.100 contagios. Todos ocurrieron en un radio de 8 metros.
Según el Centro de Investigaciones de Infecciones de Helmholtz, la Clínica Universitaria de Hamburgo- Eppendorf y el Instituto de Virología Experimental Leibniz (HPI), el virus se dispersó influido por las bajas temperaturas de las instalaciones y el sistema de aire acondicionado.
Superficies contaminadas
En nueve meses, asegura el virólogo Nicolás Muena, ningún estudio ha podido comprobar que efectivamente una persona haya contraído el virus pandémico producto de haber tocado una manilla, una caja de leche, una mesa o el pasamanos del transporte público.Inia Pérez, jefa de Infectología de la Clínica Alemana, coincide con Muena. Cuenta que se ha demostrado que lo que persiste en las superficies previamente tocadas por enfermos es el material genético del virus, su ARN.
"Que ese virus tenga capacidad contagiante es otra cosa y se ha demostrado en los últimos estudios que eso no es tan así. Al principio, en marzo, había una alta sospecha de transmisión por superficies, pero ha ido cambiando con la aparición de nuevas investigaciones que corroboran que la persistencia de virus vivo en superficies es muy baja", argumenta Pérez.
Pese a que no existe evidencia de una persona que se haya contagiado por tocar una superficie, explica Muena, la manera de transmisión no puede descartarse porque en los laboratorios el virus sí dura varios días en algunos materiales. Eso debido a que en un laboratorio no ocurre la vida doméstica, sino que se dan las condiciones para hacer que un virus sobreviva.
En el acero inoxidable, dice, el coronavirus dura entre dos a tres días. Y en el plástico polipropileno, tres días. Pero para que alguien se contagie, comenta, tienen que pasar tres cosas, que por su naturaleza son improbables: "Tiene que haber una cantidad de virus suficiente en la superficie y para que eso ocurra, alguien tiene que toser o estornudar directo en el objeto. Luego, la persona que llegue a tocar eso, tiene que hacerlo en un espacio de tiempo corto, justo después de que el infectado tosió para que el virus no se inactive. Y lo tercero es que esa persona tiene que llevarse una carga potente de virus al rostro", describe.
En España, ejemplifica Muena, hicieron un estudio en 66 productos de supermercados, provenientes de las estanterías de diez locales de ocho cadenas distintas. "Buscaron material genético del virus y no encontraron en ninguno. Es muy improbable que vaya a ocurrir una transmisión por artículos de supermercado", cuenta.
"Donde tenemos que ser extremadamente rigurosos es con los contactos estrechos. Acá los CDC nos están diciendo, oiga, usted no saca nada con andar limpiando todo si después se va a ir a compartir con gente a menos de seis pies de distancia, que no se lava las manos y no usa mascarilla", concluye.