-->

Escribe y presiona enter

On
Douglas Englen revela detalles inéditos de la misión que terminó con Osama bin Laden
Un piloto que estuvo a cargo de la operación aérea que dio muerte a Osama bin Laden, el jefe de a Al Qaeda responsable de los atentados del 11 de septiembre de 2001 en EE.UU. contra el World Trade Center y el Pentágono, reveló detalles inéditos de la misión a la revista "Military Times".

Douglas Englen, de Tennessee, era el piloto jefe de operaciones especiales Chinook 5 en 2011 cuando EE.UU. ideó un plan para acabar con el líder terrorista en un complejo en Pakistán. Englen fue una de las pocas personas que planificaron la Operación Lanza de Neptuno en casi cuatro meses. El resto de la tripulación aérea y de fuerza terrestre se enteró solo dos semanas y media antes. El plan requería de cuatro helicópteros: dos Chinook y dos Black Hawks, que son más silenciosos, explicó Englen. Los primeros actuarían como respaldo y apoyo. Los Black Hawks debían posicionar a las fuerzas terrestres en el objetivo.

Solo habían trascurrido 30 segundos del operativo cuando el piloto escuchó la señal "Black Hawk down" en su radio. El aviso se lo dio el piloto del helicóptero Black Hawk 2, explicando que el Black Hawk 1 se acababa de estrellar contra el complejo de Abbottabad, donde se encontraba Bin Laden. Englen, en su Chinook 1, y otra tripulación en un Chinook 2 estaban en un sitio de reabastecimiento de combustible para los Black Hawk, 48 kilómetros al norte, así que partió de inmediato. "Nos pusimos en modo contingencia", contó el piloto a "Military Times" (https://bit.lyL3agpH8F). "No sabía la gravedad, si se había estrellado con bajas o si se había estrellado en un área civil. Todo lo que hicimos fue minimizar nuestro tiempo y volar lo antes posible".

Como había estudiado el área y planificado los componentes aéreos del operativo llegó en menos de diez minutos. Buscó las luces de la policía para saber dónde estaba la conmoción y vio al helicóptero caído. Aterrizó justo después de que este se destruyó. "Probablemente estaba a 100 pies (30 metros) del aparato cuando explotó. Empujó el nuestro a un lado. Tuve que volar lejos, hacer un círculo apretado, regresar y aterrizar bajo la nube de hongo. Aterricé al este del complejo, al lado. Quiero decir, justo al lado", contó el militar que acaba de retirarse.

Estuvieron en tierra alrededor de un minuto y medio, mucho más que los diez a 15 segundos que acostumbran, porque tenían que cargar cosas como la bolsa con el cuerpo de Bin Laden y todo lo incautado, además de la fuerza terrestre. "Teníamos el peso máximo que podía soportar el helicóptero", dijo. Englen afirma que fue atacado tres veces por un F-16 pakistaní, pero logró sobrevivir. Al aterrizar él y su equipo fueron transportados a la base aérea de Bagram para ayudar a exhumar el cuerpo de bin Laden, que fue arrojado en el Mar del Norte de Arabia.

En total los helicópteros estuvieron alrededor de cuatro horas volando, con un riesgo extremo. "Éramos nosotros quienes estábamos penetrando en una nación soberana. Éramos los que teníamos que eludir la defensa aérea, la red de alerta temprana, y los que debíamos proteger a la fuerza terrestre, merodeando hasta una hora en un área donde podían derribarte en cualquier momento, pues posiblemente podían pensar que era un avión de la India", agregó el piloto.

Como dice que el ejército paquistaní ya estaba advertido de su presencia, "podíamos ser derribados al regresar, por lo que teníamos que evadirlos, de modo que fue una misión de vida o muerte. La misión era matarlo o capturarlo, y si nos derribaban teníamos que asegurarnos de ser estériles", agregó Englen, quien aclaró que ese término se refiere a no tener identificación ni cosas personales por si los capturan. "Tenía algo de dinero y algunos cigarros para negociar (con los captores), pero eso era todo", además de su pistola M9 y su rifle M4. Englen reveló además que participó en tres misiones para capturar a Bin Laden antes del operativo final. Una en Tora Bora en 2001, otra en el valle de Shigal, en 2006, y la tercera entre el Khost Bowl y el Valle de Tirah, en 2008. "Esa vez lo perseguimos y fue otra noche oscura. Quiero decir, era muy inteligente y nos eludía una vez más", recordó el piloto. La cuarta fue la vencida.

Click para comentar