El lanzamiento tuvo lugar en los tres astilleros principales de Rusia, de distintas partes del país, en una ceremonia por teleconferencia. El mandatario calificó esto como "un importante y significativo paso en el desarrollo de la Armada rusa", informa Efe. Putin también reveló que los buques están equipados con "sistemas de armamento, mando y comunicación avanzados, y reforzarán el potencial de combate de la armada rusa".
Dos son buques de asalto anfibio portahelicópteros, del proyecto 23900 Priboy, que están siendo construidos en el astillero Zaliv, de Kerch, al este de Crimea. Los portahelicópteros podrán desplazar 25.000 toneladas, medirán 220 metros de largo y 33 metros de ancho, y llegarán a una velocidad de 22 nudos (más de 40 km por hora). Tendrán un alcance de 6.000 millas náuticas, autonomía de 60 días, 320 tripulantes, una capacidad para transportar mil efectivos de la Infantería de Marina, hasta 75 unidades de vehículos militares, y los helicópteros Ka-52K Katran, Ka-27, Ka-29 y Ka-31, indica Sputnik News.
Otras dos son fragatas, construidas en el astillero Severnaya Verf de San Petersburgo y los últimos son dos submarinos atómicos que están siendo manufacturados en el astillero Sevmash, ubicada en la ciudad portuaria Severodvinsk, a orillas del mar Blanco.
Armas hipersónicas
Estos submarinos, del Proyecto 885M "Yasen-M", estarán equipados con armas
hipersónicas, reveló el CEO de Sevmash, Mikhail Budnichenko, citado por la agencia
rusa TASS. Las armas hipersónicas son aún más veloces que las supersónicas, ya
que son al menos cinco veces más veloces que el sonido. "Hoy estamos
desplegando barcos con armas hipersónicas, que son el futuro de la flota de
submarinos rusos", manifestó Budnichenko. Los submarinos irán armados con misiles de crucero Kalibr-PL y/o Oniks, y también misiles hipersónicos Tsirkon como armas básicas. Se llamarán Voronezh y Vladivostok, en honor a las ciudades de gloria militar rusas. Los buques y fragatas recibirán nombres de comandantes militares y navales glorificados por Rusia. Los portahelicópteros se llamarán Ivan Rogov y Mitrofan Moskalenko, y las fragatas Almirante Yumashev y Almirante Spiridonou.
"En los últimos ocho años la Armada rusa incorporó más de 200 buques de guerra, lanchas y navíos de diversas clases. Es necesario continuar implementando consistentemente las medidas del programa de armamento estatal para que el 2027 los buques de la Armada rusa estén modernizados en más del 70%", explicó el mandatario ruso. "Es necesario aprovechar al máximo su potencial científico, productivo, de cuadros, para la construcción de modernos buques de todos los tipos", agregó.
La Armada rusa actualmente tiene 60 embarcaciones en misiones de patrullaje. Putin explicó que Rusia necesita una Armada fuerte para "ayudar a mantener un equilibrio estratégico y estabilidad global", añade AP.
El presidente ruso, además, prometió a dar apoyo estatal a empresas fabricantes de armas de Crimea, península anexada en 2014. La embajada de EE.UU. en Ucrania expresó en Twitter: "La construcción no autorizada de buques de guerra de Rusia en territorio soberano de Ucrania, que fue tomado por la fuerza, viola las normas internacionales una vez más".