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Don Francisco y su cuarentena
Mario Kreutzberger (79 años) los lleva contados. "Son 75 días confinado", anuncia al comienzo de esta entrevista hecha por Zoom la tarde del jueves 28. Don Francisco está instalado en el living de su casa, convertido en estos días en escritorio y set de TV. "Ya que no viene nadie, este es mi espacio", explica mientras toma unas hojas de la mesa de centro y lee sus ayuda memoria. "Mira, acá tengo anotados todos mis compromisos para esta tarde. Esta es mi nueva normalidad", dice.

-¿Le gusta esta nueva normalidad?
-Uno se va acostumbrando a las cosas nuevas. Estoy dedicado a escribir un poco, a leer otro tanto. Lo importante es hacerse una rutina diaria.

El animador describe así su rutina diaria: "Me levanto a hacer ejercicios. Antes venía una persona con la que hacía gimnasia, hoy lo hago solo. Me subo a la máquina (trotadora) y camino cuatro kms diarios. Lo que significa que camino 20 kms a la semana y 80 al mes. En esta cuarentena llevo 160 kms caminados. Si hubiera ido a Viña del Mar ya vendría de vuelta. Después me baño, tomo desayuno y empiezo una serie de reuniones. Estamos haciendo cosas con la Teletón. También hago cosas para la TV. En la tarde le dedico un par de horas a mi libro (autobiografía) Lo que aprendí y leo. He leído más en estos días que en los últimos diez años".

-¿Qué ha leído?
-En mi biblioteca tengo muchos libros que me habían regalado y autografiado y que nunca había leído. Terminé hace poco "Las siete vidas del Gato Gamboa". Ahora estoy leyendo "La esposa del coronel", de Carlos Alberto Montaner. Antes de todo eso leí un libro sobre el conflicto en el Medio Oriente.

-Hay algo que ha llamado la atención en sus últimas apariciones televisivas: su pelo blanco.
-Claro. Hay varias versiones: una, que me conseguí la peineta de Antonio Vodanovic; otra, que solamente me ha crecido pelo blanco.

-Jajajá. ¿Cuál es la verdad, don Francisco?
-Mira, esta pandemia logró que sólo me crezca pelo blanco y así voy a quedar hasta donde alcance a llegar.

-¿Le gusta verse con el pelo blanco?
-Me tengo que acostumbran A veces me miro al espejo y me asusto porque no me reconozco. Si fueron tantos años con el pelo negro. Pero reconozcamos que hubo una transición en los años: el pelo se fue poniendo blanco con el tiempo y en último tiempo la ayuda que recibía para tener una parte del pelo negro era bastante menor. Ahora ya no recibo más ayuda con mi pelo. Es curioso que sea justo este año, que era muy especial para mí. En diciembre cumplo 80 años y tenía planeadas muchas cosas. Una era hacer una reunión con todos los periodistas para contarles de mis 58 años en T u Después iba a hacer una gran fiesta en Santiago y otra en Miami, donde vivo. No sé si me resulte irme.

-¿Quiere irse a Miami?
-Sí. Mi señora (Temmy Muchnik) tiene una afección respiratoria y este clima no le hace bien. Ya somos viejitos y tenemos que cuidarnos de manera especial. Nos han recomendado que no nos relacionemos con nadie. Que nadie entre a mi casa. Pero hemos estado bien de salud. Yo sé que estamos en el grupo de mayor riesgo.

-¿Le da miedo pensar en eso?
-Siento varias cosas. Me preocupa Chile. Estamos subiendo el número de contagios, se supone que estamos llegando al peak. Yo espero que nunca llegue el momento de decir que los ventiladores mecánicos se acabaron. Eso es lo que más me preocupa. Al mismo tiempo siento la presión de cuidarme, de cuidar a mi esposa. En estos momentos lo que más valoro son los besos, abrazos y apretones de mano. Claramente estoy más sensible, pero no sólo por el coronavirus. Con los años uno se va poniendo más sensible y reflexivo.

-Nunca había pasado tanto tiempo quieto.
-Jamás. Mira, en estos 75 días he visto y conversado más con mi señora que en los últimos diez años y nos hemos llevado muy bien los dos. He leído más libros, he tenido más tiempo para pensar y he visto más TV que en los últimos diez años. He reflexionado mucho sobre el valor de esta familia que construimos hace 58 años. Tenemos tres hijos, nueve nietos, yerno y nueras, pololos y maridos de los nietos.

Don Francisco se declara usuario -"algo elemental, hay que decirlo"- de las redes sociales Twitter, Facebook y WhatsApp. En esta cuarentena descubrió Zoom. "Llamé a un nieto, que es campeón para moverse en estas cosas, y él, desde su casa, me enseñó cómo usarlo, cómo crear un código. Al principio no sabía que tenía un tiempo limitado para hacer reuniones y que se cortaba después de eso. Hasta que decidí contratarlo. Lo encuentro muy útil. También aprendí a manejarme con Netfiix, a ser capaz de conectar mi teléfono al televisor".

-¿Qué está viendo en Netflix?
-Yo soy contrario a ver series. Encuentro que te entusiasman y eres capaz de verte siete u ocho capítulos de un viaje. Puedes pasarte una tarde entera en eso. Por eso prefiero las películas. Pero ahora, como tengo algo más de tiempo, veo series. En este momento estoy viendo "Recursos inhumanos", que se trata de un tipo que perdió su pega y no puede encontrar trabajo porque se metió en un lío tremendo. Voy en el capítulo 4. Vi "Califato", una serie sueca que muestra cómo preparan a los terroristas del Isis. Vi "Fauda" y "La casa de las flores".

-Dijo que hace reuniones relacionadas con la Teletón.
-Los lunes hacemos una reunión por Zoom para planificar la semana y los viernes otra para evaluar la semana. Con el coronavirus pasan cosas nuevas todos los días. El doctor Julio Volenski, director de la Teletón de Iquique, me contó que le habían pedido unos cojines que se les ponen a las personas cuando están intubadas para ayudarlas a respirar mejor. Resulta que la Teletón siempre ha hecho estos cojines porque tú recordarás que el 40% de nuestros niños tiene problemas respiratorios. Entonces ahora hablé para que hagamos cojines en los diferentes laboratorios que tenemos a lo largo de Chile. También estamos haciendo Telesalud (telemedicina y telerrehabilitación) con algunos de nuestros niños, actividades extraprogramáticas y hemos puesto a disposición del Ministerio de Salud nuestras ambulancias, que son alrededor de 100, para trasladar todo lo que sea necesario.

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