No sólo fue una noche en la que Juan Pablo Queraltó y Francisca Sfeir aprovecharon para celebrar juntos sus cumpleaños (él cumple el 6 de julio y ella el 7), sino que también fue una velada de anécdotas, música y por cierto, reencuentros.
"Siempre nos gusta celebrar y la celebración tiene que ver con los amigos, con nuestra gente más cercana y también celebrar la vida. Pasaba que yo también cumplía 40 años, por lo que era un momento especial, de festejar este nuevo ciclo", afirma el conductor de "Sabingo". El festejo contó con la participación del doble de Luis Fonsi, "que es un artista que les gusta muchísimo", así como amigos del espectáculo. Entre ellos llegó Américo, que les regaló un par de temas cantados en vivo. Además, aparecieron el tony Pastelito, Rodrigo van Cauwelaert, Rodrigo León, Emilia Daiber, Javier Olivares, Krishna de Caso, Francisca Merino y Felipe Avello, entre otros.
¿Diríamos que se reunió parte del "SQP" histórico?
"Así es. Podríamos decir que sí. Fíjate que no nos sacamos la foto oficial, que hubiese sido tan entretenida. Fue un lindo reencuentro de equipo. Con Felipe (Avello) siempre mantenemos comunicación, con Pancha también y con Krishna. Hace tiempo que no estábamos los cuatro juntos en un mismo lugar. Fue súper entretenido recordar anécdotas y bailar. Igual fue relajado, cada uno en sus cosas. Pero fue uno de esos reencuentros lindos, de amistades que perduran en el tiempo".
¿Hace cuántos años que no se reunían todos?
"Diría que el grupo no se juntaba desde que me fui del "SQP", así que hace unos 10 años, calculo. Harto. Fue muy especial".
Sobre la celebración, Queraltó explica que todo fue orquestado por su señora. "Por eso estuvo bien organizado. Bailamos hasta las 3 de la mañana. A las 03:30 apagamos las luces para que la gente se fuera. Fue una hora prudente, porque partimos a las 8 de la noche", advierte.
Por su parte, Fran Sfeir confesó que antes de conocer a Queraltó a ella no le gustaba festejar.
'Estaba en una época de mi vida que no quería celebrar. Pero con él tuve que aprender a celebrar la vida, porque nuestros cumpleaños son seguidos. Los celebramos juntos como un hito para liberar todo el desahogo, la catarsis, la amistad y vernos con la familia, los amigos".
Asimismo, Sfeir revela, entre risas, que fue casi un carrete de quinceañeros. "Hubieses visto el desastre que quedó. Quedó la escoba, pero esa que es rica, que sabes que fue un gran carrete. Hubo de todo, el amigo que se quedó dormido, el que pincha con una amiga, amores que nacen, el baño que pasa cerrado 40 minutos, la pieza con la puerta cerrada, la mesa llena de botellas y vasos. Fue muy teenager el carrete. Parece que lo necesitábamos".