Montones de videos virales y posteos en redes sociales muestran lo práctico que resulta renovar los azulejos de la cocina y del baño aplicándoles pintura. Es barato, se puede hacer sin contratar maestros y definitivamente le va a cambiar la cara al espacio, pero hay que tener claro que apenas pase la brocha, no hay vuelta atrás.
El influencer colombiano y especialista en remodelación de espacios Diego Fernández, que se hace llamar @Renovandoconideas en Instagram, cuenta que una de las preguntas más habituales de sus seguidores es por este tema, cosa que él no recomienda.
"He visto como quedan en la casa de mi hermana, que pintó los que tenía en su baño y se le puso terrible al año. Tuvo que poner vinílico autoadhesivo encima (para tapar la pintura) como solución temporal. Entiendo que las personas quieran pintar porque es una opción más económica que retirar el azulejo antiguo, pero no es lo mejor cuando está en contacto con el agua", explica.
Él vive en un departamento antiguo en Bogotá con azulejos en el baño y su forma de cambiarlo fue con grifería nueva y accesorios modernos.
"Era mucho el riesgo porque si son zonas que tienes que lavar, cocinar, pasar productos químicos para limpiarlo, etcétera. Te va a funcionar por un tiempo y luego se va a empezar a desgastar y se verá horrible. Porque también depende mucho cómo se haga el proceso", señala.
Muchos arquitectos y constructores civiles dedicados a las renovaciones no están de acuerdo con pintar las cerámicas, pero entienden que es una forma más económica, no requiere mano de obra especializada ni retirar escombros y lo puede hacer el dueño de casa.
"Las pinturas no son tan resistentes, en un mediano plazo, en unos dos años o menos, va a empezar a presentar problemas de adherencia y resistencia, va a necesitar una nueva capa y vas a estar constantemente restaurando algo que en teoría se hizo para generar un nuevo espacio", advierte el arquitecto Felipe Zelada, especialista en diseño sustentable y docente de la Facultad de Arquitectura de la Universidad del Desarrollo.
Cara lisa
Al tener una superficie lisa en su cara exterior, el azulejo imposibilita una buena adherencia de la pintura. Por eso hay que usar productos especiales para cerámicas pensados en una mejor adhesión."Lo que más se usa son pinturas sintéticas que están hecha en base a aceite y que tienen un acabado más brillante. Hay pinturas bifásicas que son más resistentes porque vienen con un catalizador para adherir y el esmalte, pero son más tóxicas, hay que usar guante, mascarilla y ventilar", explica Zelada.
jefe Daniel Davidovich, de producto revestimientos de Sodimac, explica que hoy existen los primer o promotores de adherencia en base a agua para superficies poco porosas que ayudan a aplicar pinturas en lugares difíciles.
"Los primers generan un puente o nexo entre la superficie porque el azulejo es resbaloso. Solo hay que tener preocupación con el tiempo de secado, hay que esperar seis horas antes de pintar y siete días para un secado definitivo", señala.
La limpieza
Un paso fundamental para mejorar la vida útil de la pintura es realizar una limpieza profunda a la cerámica y al fragüe antes de empezar."La cerámica es impermeable, pero la zona del fragüe es permeable y aloja suciedad y hongos. Hay que limpiar todo para que quede sin polvo ni grasa con un detergente neutro. Incluso hay que limpiar en lugares donde la cerámica no está expuesta al agua porque si no, se van a producir grietas -aunque sean microscópicas- que terminarán levantando la pintura. No será algo agradable ni tampoco higiénico", destaca Fernando Urra, constructor civil y académico de la Escuela de Ingeniería en Construcción de la Universidad Mayor.
No hay vuelta atrás
Los especialistas indican que hay que tener claridad que una vez intervenido el azulejo no será posible recuperar su estado original, porque al tratar de remover la pintura se raspará con la espátula u otras herramientas, dañando su cara exterior."Va a quedar opaca o rayada porque se altera su superficie", dice Fernández.
"Es una decisión que no es reversible. Lo que queda es volver a pintar sobre esa misma pintura", dice Zelada.
O cambiar los azulejos por unos nuevos.