Si se trata de transmitir en vivo, Francisca Sky tiene lo que sería el equivalente a un canal de televisión, con programación que cambia durante la semana. En su canal de Twitch, los lunes hay un podcast de tecnología; el martes, un club de lectura -lo último que leyeron fue "Me alegro de que mi madre haya muerto" de Jennette McCurdy- y así cada día.
Pidiéndole perdón a septiembre, vamos con algunos anglicismos para ir a los que nos convoca. Si Sky, cuyo apellido real es Carvajal, se pasa todo ese rato online, no lo hace desde una oficina, sino que desde un setup de streaming, adecuado como Io que ella llama una taberna cyberpunk, un espacio que mezcla lo nuevo y lo antiguo.
"Es que cuando uno trabaja en creación de contenido, tu oficina es tu espacio de creación, de inspiración. Lo que yo hago no es con horario", cuenta la twitchera.
Sky explica que antes, cuando vivía con su familia, usaba un chroma para simular la taberna, una pantalla verde donde superponía imágenes.
"No quería que se viera mi cama o mis artículos personales, que son más íntimos. Aparte estaba estudiando en ese entonces y el desorden abundaba", explica.
Ahora vive en un departamento de tres ambientes y destinó uno de los dormitorios a espacio de trabajo.
"Toda la casa está pensada y decorada para que yo pueda poner una cámara en cualquier esquina y hacer contenido, pero es en la taberna donde está la mejor tecnología", cuenta.
En su set hay cinco estandartes que representan diferentes aspectos de su personalidad, una pantalla cuyo fondo cambia de acuerdo a la época -en invierno es una fogata y en verano, un acuario- y cuatro pantallas led que cumplen diferentes funciones cuando transmite, con la idea de maximizar la interacción con su público. Y, claro, muchos libros.
Me cuesta entender por qué hay tantas pantallas.
"Como tú sabes, yo hago transmisiones en vivo y la gran gracia de mi contenido es que estoy interactuando. Entonces, una pantalla les pertenece a las personas que están en vivo conmigo, la principal es donde estoy mostrando el juego o el libro, otra en la que monitoreo el stream, donde veo lo que vería el switchman en la televisión. Y un iPad en el que voy revisando información muy particular".
¿Siempre ha tenido tantas pantallas?
"Ojalá siempre hubiesen sido tantas. Yo partí con un notebook todo piñufla. Pero en la medida en que fui creciendo, también lo hicieron las necesidades. Y creo que ha sido un camino precioso partir con un notebook, después con un tarro y una pantalla, después con dos y así. Cuando me independicé dije: Voy a tener todas las pantallas que quiera ".
Si uno se dedica a las transmisiones. ¿es importante tener un set atractivo? ¿Debe ser bonito?
"Creo que es una decisión personal. Cada creador tiene un perfil y una identidad. A algunos les ha funcionado con una pared atrás y nada más y es porque su personalidad llena el espacio. Yo quizás tengo tendencias más estéticas. Me gustaba toda la idea de que se viera por todos lados que está decorado, aunque no creo que sea necesario. Es una decisión que hay que tomar".
Es como para mostrar un camino.
"Creo que el crecimiento lo hace más bonito todavía. Partir
con una webcam, después por fin comprarte una réflex, ir
decorando de a poquito tu espacio. Hay gente que
streamea literalmente en la esquina de un cuarto y con luz
amarilla, ni siquiera con una iluminación profesional. Pero
como creador, eres tú el que está proponiendo".