En una decisión unánime, el Tribunal Constitucional (TC) declaró admisibles los recursos que buscan impugnar siete de los 13 indultos otorgados por el Presidente Gabriel Boric. Los requerimientos, presentados por Chile Vamos y Demócratas, serán revisados por los diez ministros que componen el organismo.
Los indultos que analizará el TC son los siguientes:
Jorge Mateluna (48 años):ex miembro del Frente Patriótico Manuel Rodríguez (FPMR).Condenado en 2014 a 16 años de cárcel por asaltar un Banco Santander.
El delito ocurrió el 17 de junio de 2013. Según la sentencia, Mateluna y otras dos personas concurrieron a un Banco Santander ubicado en Enea, comuna de Pudahuel, donde obligaron a los clientes y a un carabinero de civil a tirarse al suelo para robar las cajas de dinero. Tras el robo, el trío huyó del lugar a bordo de un automóvil, pero fueron descubiertos por otros policías de civil. Tras una persecución, que se prolongó por avenida Américo Vespucio, los funcionarios lograron darles alcance y recuperar armamento de guerra desde del vehículo.
Luis Castillo Opazo (34): condenado a 4 años de cárcel por desórdenes públicos en la oficina del Registro Civil de Copiapó y otros puntos de la ciudad.
Los delitos ocurrieron entre el 11 y 21 de noviembre del 2019. De acuerdo a la sentencia, Castillo participó en los destrozos que afectaron a la Intendencia de Atacama, las dependencias de Aguas Chañar, una sucursal de Farmacias Ahumada, una automotora y el Registro Civil de Copiapó. También intervino junto a manifestantes en el levantamiento de barricadas.
Bastián Campos Gaete (22): estudiante, fue condenado a 3 años y 61 días de cárcel por portar un elemento incendiario y robo en lugar no habitado, ambos delitos ocurridos en Antofagasta en noviembre del 2019.
Según el tribunal oral de Antofagasta, el joven fue detenido por Carabineros cuando salía de un supermercado Santa Isabel que era saqueado. Iba encapuchado y con una mochila en su espalda. En la revisión de sus pertenencias le descubrieron tres botellas de pisco Mistral que fueron sustraídas, además de un envase de vidrio repleto de parafina y cubierta con un paño rojo. "Son elementos que en su conjunto son conocidos como bomba molotov", dice el fallo.
Jordano Santander Riquelme (38): condenado a 7 años de cárcel por homicidio frustrado a un detective de la PDI y tres penas remitidas por receptación y daños calificados.
Según la sentencia, Santander concurrió junto a otros individuos a dependencias de la Fiscalía Local de San Antonio y disparó balines de acero contra una mampara de vidrio, quebrándola en su totalidad. Luego se dirigieron al cuartel de la PDI, donde abrieron fuego contra el frontis del edificio y dos vehículos policiales. Horas después, el sentenciado embistió su vehículo contra un detective que intentó fiscalizarlo. Una vez que logró ser detenido, los funcionarios descubrieron bombas plásticas, armas tipo honda, punteros y municiones de balines dentro del automóvil.
Felipe Santana Torres: ayudante de mueblista, fue condenado a 5 años de cárcel por incendio de inmueble habitado, 540 días por hurto simple y 300 días por daños a bienes de uso público.
De acuerdo con la investigación, el 13 de noviembre de 2019 trepó a un semáforo de calle Urmeneta en Puerto Montt. Lo enlazó con una cuerda y luego, con ayuda, Io botó. Ese mismo día rompió con un martillo las baldosas de la calzada, para usarlas como proyectiles. La tarde siguiente trepó la protección de madera de las columnas de la catedral y le hizo un forado. Luego, con ayuda, forzó la entrada del templo y sacó objetos religiosos, con los que hizo una fogata. La tarde del 18 de noviembre volvió a romper baldosas de Urmeneta con San Martín. Más tarde prendió fuego a las puertas de la catedral. Al día siguiente volvió a romper baldosas del centro. El 22 de noviembre encendió una barricada con neumáticos junto a una turba, en el centro de la ciudad.
Brandon Rojas Cornejo (22) y Claudio Romero Domínguez (21): condenados a 5 años de cárcel por lanzamiento de bombas molotov. El último mencionado también fue sentenciado a 61 días de presidio por asociación ilícita.
De acuerdo a la investigación de la Fiscalía de Tarapacá, ambos integraban la pandilla "K-Pop Primera Línea Tarapacá", cuyos miembros se coordinaban por WhatsApp para reunirse en la "zona cero" de Iquique. Según la sentencia, entre el 27 de diciembre de 2019 y el 18 de octubre de 2020 arrojaron más de una docena de artefactos incendiarios contra Carabineros.