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Pancha Merino relata asalto a restaurant en Vitacura

El domingo es uno de los días más propicios para salir a almorzar algo afuera. Eso mismo pensó Francisca Merino cuando con su novio, el italiano Andrea Marocchino, acordaron ir a pasar un buen rato a algún restaurante de avenida Nueva Costanera, en Vitacura. Lo que prometía ser una jornada rica en placeres culinarios se transformó en una cita del terror.

Cerca de las 14:30 horas la pareja llegó hasta el restaurante Brunapoli, especializado en pizzas y pastas. Se instalaron cerca de la terraza en una mesa que quedaba disponible pues a esa hora estaba lleno. Mientras Pancha y Andrea hablaban de su futura boda y anécdotas, ella cuenta que "escuché gritos y alguien dijo pistola ". Nos metimos, al igual que todos, bajo las mesas".

La acción de protegerse, Merino la realizó porque justo en ese restaurante se bajó un delincuente vestido de delivery para robar a un comensal. Así sigue el relato que la actriz además compartió en su cuenta de Instagram, @panchamerinol. "Se baja un tipo en una moto y le pone una pistola, encañona, a una niñita de cinco o siete años promedio para robarle el reloj al papá. Fue casi un minuto de terror lo que vivimos. Fue muy rápido, pero el tiempo pasó lento. Era como estar en una película horrible".

Tras el asalto llegó hasta el lugar la Brigada Investigadora de Robos e Intervención Criminalística (Biro Incri) de la Policía de Investigaciones (PDI). El inspector Jõrghans Laming confirmó que "en horas de la tarde (del domingo) un grupo familiar se encontraba almorzando, momento en el cual son intimidados por un sujeto que portaba un arma de fuego. Intimida en primera instancia al padre de la familia y posteriormente a una de sus hijas con la finalidad de sustraer un reloj de alta gama que portaba la víctima (el padre de la niña)".

Finalmente el investigador agregó que tras el hecho, el asaltante "abordó una motocicleta, que simulaba ser un delivery, huyendo en dirección sur. No se registraron disparos ni personas lesionadas".

Tras retornar de su almuerzo, Francisca y Andrea quedaron con una sensación de vértigo e inseguridad. Merino al habla: "En mis 49 años de vida nunca había visto este nivel de violencia. No podemos seguir viviendo así. Chile a los ojos del mundo es uno de los países más seguros y eso se está terminando".

Seguridad

Las noticias sobre robos con violencia en calle Nueva Costanera, epicentro gastronómico y de tiendas de alto nivel, se pueden encontrar a diario. A fines del año pasado un guardia fue baleado cuando trató de ayudar a un hombre al que le robaron un reloj Rolex y un iPad a la salida del restaurante La Mar y este hecho en Brunapoli fue el tercero que se registra en ese local.

Para Catalina Roberts, ingeniera que vive en plena Nueva Costanera, es común ver este modo de operar de los delincuentes. "Hemos visto por lo menos dos veces a gallos que se bajan de motos de reparto a domicilio y asaltan a las personas que están en las terrazas de los restaurantes que dan hacia la calle. Es como llegar y llevar para los ladrones acá. También se han subido a las veredas para robar carteras o teléfonos a las personas que van caminando".

Ella misma comenta que "sé que después de todo esto los restaurantes comenzarán a cerrar sus terrazas y a poner guardias. Les van a poner vidrios para que no vuelvan a suceder estos robos".

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