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El fenómeno natural que causa las megavarazones de Arauco

Al mirar de lejos sólo se aprecia una gran masa flotante, pero gracias a las decenas de registros que los habitantes de Laraquete realizaron con sus celulares, en las fotos y videos se distinguen miles de pequeños peces que llegaron este lunes a la localidad ubicada 20 kilómetros al norte de Arauco, en la Región del Biobío.

La impresionante varazón se produjo en la tarde y la infinidad de peces subió por el río Laraquete, abarcando una extensión de 2,5 kilómetros desde la desembocadura.

"Es un varamiento que ha llamado la atención por el volumen. Tenemos equipos trabajando en el lugar tratando de establecer a qué se puede deber. Eso sí, todo apunta a que nuevamente se está presentando el fenómeno de caída de las concentraciones de oxígeno en el agua, lo que estaría provocando la mortalidad de estas especies", comentó Claudio Báez, director de Sernapesca Biobío.

Según Báez, ya tienen 10 fenómenos similares registrados en la zona. El último fue recién el sábado: un varamiento que abarcó 2,4 kilómetros desde la desembocadura del río Carampangue hacia la comuna de Arauco. Allí se trató principalmente de sardinas y anchovetas, más otros peces como pejerreyes, bagres y algunos crustáceos.

Víctor Gallardo, doctor en biología marina y académico de la Facultad de Ciencias Naturales y Oceanográficas de la Universidad de Concepción dice que estos fenómenos no son una novedad, pero sí le llama la atención que "la frecuencia e intensidad de las varazones es aparentemente mayor a otros años".

Estas se deberían a un fenómeno llamado surgencia. "Tenemos una capa de agua que está en contacto con la atmósfera, que tiene condiciones de oxígeno favorables para la vida. Pero hay una capa más abajo, la corriente de Gunther, que no va hacia el norte como la corriente de Humboldt, sino que va hacia el sur", describe Gallardo.

"Cuando los vientos son del suroeste, en primavera y verano, también impulsan las aguas de la corriente de Humboldt hacia el norte. Para equilibrar las condiciones de densidad, esa agua que va por debajo tiende a aflorar, sobre todo cerca de la costa. Ese vacío que se genera cerca de la costa Io llena la corriente que está más abajo, que tiene poco o casi nada de oxígeno".

En ese escenario, agrega el biólogo marino, "la fauna no alcanza a escapar a altamar, queda rezagada en las bahías y no tiene para donde salir. Yo he Visto incluso a los peces saltar del agua a la playa porque no puedan estar en esa agua".

-¿A qué se podría deber el aumento de la frecuencia de las varazotes, Víctor?
-Las aguas superficiales de la costa chilena han estado bastante más frías que lo normal en los últimos meses. Durante el año pasado estuvo entre 2 y 3 grados más fría que el promedio de los últimos 30 años (fenómeno llamado La Niña).

-¿Y cómo se relaciona eso con la surgencia?
-En este caso, lo más probable es que ha habido mucha más frecuencia de viento suroeste que anima la surgencia. Vientos más intensos y más duraderos.

El especialista, eso sí, pone el foco en otro punto. "Habría que ver cuánto fitoplancton se está produciendo en el mar. Si hay más surgencias de aguas de fondo, habría que ver otro aspecto, porque son aguas que tienen otras cosas muy buenas para la vida: nutrientes, abonos, fósforo, nitrógeno. Todo eso sale del fondo, llega a la superficie y queda expuesto a la luz. El fitoplancton aprovecha la riqueza de los nutrientes y se producen grandes poblaciones de un tipo de alimentos para peces.

-Es decir, ¿podría haber un beneficio a futuro?
-Claro, puede haber un beneficio mucho mayor. Una varazón pasa a ser un detalle frente a procesos oceanográficos mayores, que sería el incremento de la productividad de las aguas superficiales, lo que se puede traducir eventualmente en una mayor abundancia de sardinas y toda la cadena trófica.

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