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Daniela Colett

El Atlético Mineiro de Jorge Sampaoli oficializó el fichaje de Eduardo Vargas (30) este lunes por la mañana. El cuadro de Belo Horizonte compartió imágenes del primer entrenamiento de Turboman con su jefe predilecto y también develó el dorsal que usará esta temporada: el número 10. "Estoy muy contento. Hablé con Jorge, me motivó y me pone feliz estar acá con él para dar mi mejor versión", dijo el atacante chileno.

A unos 8.000 kilómetros de Belo Horizonte, en Monterrey, México, se encontraba su esposa, la brasileña Daniela Colett, quien siguió los entretelones con una mezcla de alegría y nostalgia. "Tengo el corazón dividido. Sabía que nos íbamos a fin de año, pero esto fue repentino y creo que no lo pude asimilar tan pronto. Nos encariñamos mucho con Monterrey y su gente, vivimos años muy felices", cuenta la diseñadora.

-¿Cuándo tienen pensado unirse a Edú en Brasil, Daniela?

-Nos vamos a fin de mes. Me quedé acá en Monterrey para celebrar el cumpleaños de mis hijos, para que ellos y yo podamos despedirnos de nuestros amigos. Y también para preparar bien la mudanza.

Los hermanos de Daniela viajarán a México en las próximas horas para acompañarla y ayudar en los trámites. El más importante es dejar la casa que posee el futbolista y su mujer en Monterrey. "La casa es nuestra y la dejaremos en arriendo por si algún día, en el futuro, volvemos. Con Eduardo siempre dijimos que cuando se retire ojalá volvamos a vivir acá. Los muebles y esas cosas las dejaremos, sólo nos llevaremos ropa y pertenencias personales. Menos mal que estarán mis hermanos para el vuelo a Brasil, sino, imagínate: sola con tres niños y dos perros, jajajá", explica Daniela.

La esposa de Edú dice que sus tres hijos (Antonella, Benjamín e Isabella) no tuvieron mayores dramas con el inminente traslado. "Estuvimos en Brasil en agosto y estaban felices por pasar un tiempo más cerca de mi familia. También estarán más cerca de Chile y de la familia de Eduardo. Creo que van a extrañar más cuando ya estemos en Belo Horizonte", asegura.

-¿Y usted, va a echar de menos también?
-Mucho. Siempre nos trataron bien acá. Estaba con un proyecto, recién empezando, pero lo dejaré para cuando regrese a México. También dejo varias amigas en Monterrey, algunas eran esposas de compañeros de Edú en Tigres y otras las conocí por fuera. A Pao y Debo las quiero como hermanas, también a Heidi y Denise. Nos juntábamos siempre, íbamos de vacaciones con nuestros hijos. Me pongo triste al pensar en la despedida.

-¿Puede contarnos sobre el proyecto que estaba armando en México?
-Es algo relacionado con vestuario, pero no puedo decir qué es. Pero quiero transmitir lo real de las mujeres. Uno ve tanta foto falsa en redes sociales, con Photoshop, buscando la perfección que no es real y no existe. Mi proyecto está direccionado a las mujeres reales, que se sientan seguras.

-Si pudiera elegir un recuerdo de Monterrey, ¿cuál sería?
-Si me llevo algo de acá, sin dudas, sería mi hija Isabella, que es mexicana. Pero en general son puras cosas buenas, fuimos muy felices aquí.

La felicidad también empapa Belo Horizonte y el más dicharachero es Don Sampa, quien por fin logró fichar a su delantero regalón. "El año pasado, cuando dirigía Santos, también pidió a Vargas pero el club no tenía el aparato económico para traerlo. La prensa e hinchas tienen expectativas altas de este refuerzo, principalmente por lo que hizo Vargas en Gremio hace algunos años y también por lo que logró junto a Sampaoli. Hay esperanzas de que puedan reeditar esos éxitos juntos", analiza André Hernan, periodista del diario "O Globo".

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