La situación del Covid-19 en Reino Unido -así como en el resto de Europa- es compleja, asegura Diana Massis (51), ex periodista de radio ADN y ex conductora de "Hora 25" (TVN), quien hace tres años reside en Londres junto a su familia.
"Está raro, como en todas partes, bien difícil, porque están aumentando los contagios. Todas las personas, no solo el gobierno, quieren que esto se mantenga bajo control para no volver al confinamiento que hubo en marzo pasado", dice.
Es la temida segunda ola del coronarivus que está pegando con fuerza en Europa. Este martes, en Reino Unido se reportaron 20.890 nuevos contagios y otros 102 fallecimientos por Covid-19, según los datos oficiales del ministerio británico de Sanidad.
Los expertos alertan de un incremento "exponencial" de contagios en el país, que desde el inicio de la pandemia ha registrado 44.998 fallecimientos y más de 890.000 casos positivos. De hecho, en los últimos 15 días se ha duplicado el número de enfermos de Covid admitidos en los hospitales, dijo el primer ministro, Boris Johnson.
-¿Cómo fue el confinamiento, Diana?
- Reino Unido fue el país con el lockdown más relajado de Europa, comparado con Italia, Francia y España. El confinamiento terminó en junio, pero nunca fue una cuarentena total. Se nos permitía salir una hora al día a dar un paseo con la familia o hacer deporte. No podíamos movernos a otras ciudades ni viajar y solo estaban abiertos los comercios de primera necesidad. No había clases presenciales. No era obligatorio el uso de la mascarilla, casi nadie la usaba en la calle, ni siquiera en el supermercado; salvo las personas de los trabajos esenciales que usaban el transporte público.
-¿Qué pasó que volvieron a las restricciones?
- En junio comenzó la apertura. Mis hijos (11 y 7 años) volvieron al colegio. De a poco abrieron los restaurantes, cafés y las tiendas comerciales. Como todavía había buen tiempo, las personas salieron a los parques a hacer picnic y a juntarse con gente que no fuera familia. Fue como un veranito de San Juan, si se quiere. Ahora estamos restringidos de nuevo.
-¿Cuáles son las nuevas medidas en Reino Unido?
- Ahora el gobierno está haciendo lo que hizo Chile desde un principio: cuarentenas parciales y dinámicas según los datos epidemiológicos. Pero, en general, está la regla de seis, que significa que puedes reunirte con hasta seis personas, tanto en interior como en exterior, que sean solo de tu núcleo familiar cercano o que integren tu burbuja social. Los restaurantes, café y el comercio funcionan hasta máximo las 22 horas. Puedes comer en un local solo con tu familia o gente de tu burbuja. Ahora es obligatorio el uso de mascarillas en el transporte público. Los gimnasios y cines siguen funcionando.
-¿Sus hijos asisten al colegio?
-Sí, ambos. Se van en bicicleta, se demoran 10 y 20 minutos en llegar. Lo que hicieron los colegios fue diferir los horarios de entrada y salida para evitar aglomeraciones. Los niños hacen una fila y el profesor les toma la temperatura. En el patio pueden reunirse en grupos de hasta cinco estudiantes. El uso de la mascarilla es obligatorio solo en espacios comunes. Usan sanitizador (alcohol gel) y se lavan las manos todo el día. Para el gobierno es muy importante que los colegios se mantengan abiertos, porque los niños pueden retrasarse mucho, y porque si no lo hacen, los padres no pueden trabajar.
-¿Y ahora las personas usan más la mascarilla?
-Aquí la gente no usa mascarilla cuando camina por la calle. El mensaje de las autoridades es "use mascarilla si no puede mantener el distanciamiento social". Este es un país donde respetan mucho la libertad y la responsabilidad personal. Te dicen que te expongas lo menos posible y a partir de ese mensaje las personas toman las medidas que mejor les parezcan. Por ejemplo, yo no ocupo la mascarilla en la calle, solo la uso para ingresar a tiendas, supermercados o cuando utilizo el transporte público.
-¿Cómo se distrae junto a su familia?
-Tratamos de exponernos lo menos posible, entonces no salimos mucho. El mejor panorama hoy en día es ir al parque, porque no puedes hacer ninguna otra cosa. Vamos en familia, cuando mis hijos llegan del colegio. Allí ellos pueden correr y jugar. Cada uno de ellos tiene una burbuja social: el más chico tiene cinco amigos con los que siempre juega, entre los padres nos organizamos para salir. El más grande se armó su propia burbuja. La idea es siempre estar en contacto con las mismas personas y no mezclarse con otras, para evitar los contagios.
-¿En qué está usted?
- Sigo trabajando como periodista freelance, estoy colaborando con el portal de la BBC Mundo, también estoy haciendo clases de español. Estoy estudiando un postgrado en educación en la Universidad de Goldsmiths, para ser profesora y poder enseñar idiomas en la secundaria (enseñanza media). Pienso que muchas personas están intentando abrir nuevas vías porque los cambios han sido fuertes para todos y el trabajo también ha sido complicado. Es una nueva aventura y estoy muy entusiasmada.