Al final, dice, se acostumbró al teletrabajo, pero hay algo que se le escapó: "Me di cuenta que mi piel cambió, que se resintió. Está más gris, como sin vida. Me salieron arruguitas en los ojos, se acentuaron las patas de gallo y las del labio en este tiempo de cuarentena".
El testimonio de Macarena se asimila mucho a los que profesionales de la estética están escuchando de sus pacientes: "Las consultas por cambios en la calidad de la piel han aumentado mucho hace un mes. Desde que comenzaron a bajar las cuarentenas la gente empezó a notar lo que este encierro ha significado para su piel. Los malestares recurrentes son aparición de nuevas arrugas, piel seca, manchas y acentuación de acné, dermatitis", comenta el dermatólogo José Trucco de la Universidad de Chile.
Para la cirujana plástica Ariana Sánchez "en este tiempo de cuarentena se produjo la tormenta perfecta para ajar el rostro. Están todas las condiciones para provocar un estrés cutáneo que viene ligado al estrés que estamos viviendo".
-¿Cuál es esa tormenta perfecta, doctora?
-Son varias cosas: comemos mal, trasnochamos por esta sensación de incertidumbre, nos hidratamos menos, no tenemos vitamina D, que es la que nos da el sol, el estrés al que estamos enfrentados disminuye la producción de colágeno y, como si fuera poco, hay falta de oxigenación. Y algo muy importante es que estamos frente a la pantalla del celular o del computador mucho tiempo al día, frente a una luz azul que genera manchas y radicales libres en la piel.
-Todo mal, entonces.
-Sí, muchas mujeres me dicen que sienten que envejecieron con la cuarentena o que sienten que ya no tienen color, que están como grises.
-Concretamente, ¿qué pasa con la piel?
-Las arrugas nuevas que más han aparecido son alrededor de los ojos, el ceño. Estas no tienen que ver con la gestualidad, sino que con el esfuerzo que hacemos al estar frente a la pantalla. Las arrugas supralabiales o nasogeneanas (arrugas del fumador) están ligadas al estrés al apretar los músculos, al fumar. A esto sumamos la tormenta perfecta de la que te hablé y tenemos el colapso de la piel.
-Entonces es el encierro.
-Es que los hábitos cambiaron. Por ejemplo, una persona que camina por la calle todos los días, absorbe vitamina D o, en normalidad, tampoco está todo el día frente a una pantalla con luz artificial. Hay muchos aspectos de nuestras vidas que nos llevan a cambiar la calidad de la piel.
La cosmiatra de la clínica Mesoclinic Marisela Esquivel agrega que "las circunstancias cambiaron también porque las mujeres ya no se están haciendo los tratamientos que se hacían antes, incluso algo tan básico como una limpieza profunda. Aunque, claro, tampoco hay plata para eso. La piel está pidiendo ayuda y no se la estamos dando porque no es la prioridad. Es cuando se sacan la mascarilla que se dan cuenta lo deslucida que está su piel".
Otro punto que ha visto Pablo Serrano, médico especialista en láser, "es el cambio en la piel, sobre todo en pieles sensibles, asociado al uso de mascarillas y el estrés de la contingencia. Se generan brotes con más frecuencia porque las mascarillas pueden ser muy oclusivas para la piel; ideal que sean de algodón y mantenerlas limpias".
Soluciones
Para ponerle un parelé al crecimiento de sus arrugas, Macarena Tondreau, se aplicó: "Empecé a usar una maquinita que se llama Tripollar Eyes, que me ha ayudado con las arrugas del contorno de los ojos y nasogeneanas, ya que estimula el colágeno de la piel a través de la radiofrecuencia. En dos semanas de uso ya noto la piel más lisa".La cirujana plástica Ariana Sánchez, también tiene un listado de soluciones: "Hidratarse bebiendo mucha agua, consumir frutas enteras, tomar sol hasta las 9 de la mañana y después de las tres de la tarde, hacer ejercicios y tener pensamientos positivos".
"Lo que ayuda mucho es ir a la farmacia y pedir un multivitamínico bueno que nos ayude con la falta de vitamina D y otras importantes para la piel. Tampoco hay que olvidar la limpieza diaria del rostro y, si se puede, pedir un kit de limpieza profunda", recomienda la cosmiatra Esquivel.
Para el dermatólogo José Trucco "hay varias opciones que pueden ayudar. Hay unos ejercicios de tensión y distensión de músculos faciales que sirven mucho para ejercitar y darle vida al rostro. Uno de ellos es uno básico que consiste en pasar las yemas de los dedos por debajo de los ojos y llevarlos también desde la frente a las sienes".
Y si se trata de trucos la maquilladora Maida García (@maidagarcia.makeup) da un par: "Están los roller de jade, hay unos con vibración que ayudan mucho; te puedes poner aceite de coco, incluso de oliva o una vitamina C pura y pasarte estos roller. También se puede usar café en grano para las ojeras e hidratar esa zona. Hacerse una rutina diaria que incluya estas gomitas coreanas de exfoliación, sirve mucho también".