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Andrés Vivanco
Lo despidieron de T VN y puso un restaurante que no funcionó. No se desanimó y junto a un socio instaló una pequeña cafetería en el Metro Manquehue llamada Bon Bon que en dos años se convirtió en una cadena con cinco puntos. Cuando proyectaba crecer más vino el estallido social y le saquearon el local más grande. No decayó y lo recuperó en el verano, pero en marzo se apareció el coronavirus y hubo que cerrar. Pero otra vez no se echó a morir y mientras esto pasa, junto a su cuñado, se puso a vender pisco sour. Si Andrés Vivanco, ex notero del "Buenos días a todos", fuera boxeador, seguro su nombre sería Rocky.

El primer golpe lo recibió el 19 de octubre pasado. "Ese día me enteré por la radio que nos habían saqueado completo el local del Metro Ñuble (...) perdimos 12 millones de pesos en infraestructura", cuenta Vivanco. El segundo combo fue el 18 de marzo. "Tuve que cerrar todos los locales del Metro por la cuarentena y nos acogimos a la Ley de Protección del Empleo", resume.

Pensando en qué hacer durante este periodo, junto a su cuñado Agustín Merino decidió vender pisco sour frozen (congelado). Así nació Iceberg Sour. "Estuvimos una semana buscando la receta ideal", revela Andrés hasta que partió la venta por WhatsApp e Instagram (@iceberg_sour), hace un mes y medio. "Vendemos entre viernes y domingo. La semana pasada vendimos 100 botellas de litro a 10.000 pesos cada una. En toda crisis hay una oportunidad", cierra Vivanco.

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