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Analistas en seguridad evalúan los cambios que Carabineros aplicará a las Fuerzas Especiales
Las que conocemos hasta ahora como Fuerzas Especiales de Carabineros cambiarán su nombre. Con la reestructuración que adelanta la institución, el grupo que enfrente manifestaciones se llamará"Control de Orden Público" (COP) y será una especialidad.

Así lo dio a conocer Mario Rozas, director general de Carabineros, quien confirmó que la reestructuración "va a partir por un reentrenamiento de los actuales integrantes (de Fuerzas Especiales) y conlleva la capacitación física, sicológica y de todos los medios que se utilizan actualmente en el control del orden público y el objetivo es innovar en lo que son las técnicas y las tácticas de control del orden público". Además, dependerán directamente de las respectivas jefaturas de los generales jefes de zona "para ser un mando mucho más directo y ejercer un control más efectivo en las operaciones del día a día", agregó Rozas.

El objetivo es que dentro de la institución los efectivos entrenados como COP "tendrán todos los atributos, condiciones y competencias con una promoción y respeto de los derechos humanos", agregó el general Rozas.

Una mesa de trabajo, a cargo del general subdirector de Carabineros, Diego Olate, y el director nacional de Orden y Seguridad, Ricardo Yáñez, es la encargada de llevar adelante las modificaciones.

Rozas también informó la baja de cuatro generales: Jorge Ávila, jefe de la Zona de Control de Orden Público; Rodrigo Vicencio, jefe I zona Tarapacá; Roberto Machuca, jefe XII zona Magallanes y Antártica Chilena; y Rodrigo Ramos, director de Planificación y Desarrollo.

Nuevas tecnologías

Nuevos métodos de disuasión con tecnología usada en otros lugares del mundo forman parte de la reestructuración de Fuerzas Especiales, que incluye la incorporación de armas no letales, vehículos más livianos y versátiles, y el uso de medios audiovisuales.

Sobre las nuevas tecnologías que podría usar Carabineros, analistas en seguridad repasan las tácticas que se utilizan en Estados Unidos y Europa.

Guillermo Benítez, ex coronel de Carabineros y actual consultor en seguridad, considera que en materia de tecnología es vital "conocer el área de operaciones. Significa analizar el lugar donde se está produciendo el evento, identificar el comportamiento de la masa de personas".

Drones. Como actualmente existen dispositivos que permiten derribar drones de la policía y rayos láser que afectan su funcionamiento, en varios países se usan los "drones señuelos", que sirven como distractores y protegen al dron principal, de mayor resolución. "En Estados Unidos incluso tienen águilas entrenadas en el perímetro de la Casa Blanca para que cacen drones intrusos", comenta Guillermo Benítez.

Cámaras. Aunque ya hay carabineros que llevan cámaras tipo GoPro en sus cascos, registrando operaciones, la idea es que "el máximo de personal cuente con un sistema de grabación de alta resolución, tanto en sus uniformes como en los vehículos".

Sonido. Uno de los elementos que más se mencionan como disuasivos son los emisores de ruido. Ralph Vladimiro, gerente general de Vip Seguridad, explica que estos dispositivos van "dirigidos al oído medio, para afectar el equilibrio del antisocial. El objetivo es desequilibrar las posiciones de grupos violentos, desagrupar y detener. El ex coronel Benitez comenta que "Carabineros intentó traerlo hace un par de años, pero no se le permitió porque podría afectar los oídos". Guillermo Holzmann, analista en seguridad, agrega que este sonido "es bastante agudo y te inmoviliza, hay determinadas frecuencias que generan la capacidad motora. Esto está a prueba en la policía de Barcelona".

Pintura. Se mencionan los inyectores de pintura. "Son de colores o transparentes que pueden ser vistos con luz ultravioleta o binoculares con filtro. Sirven para marcar antisociales y luego detenerlos en un tiempo inmediato al delito". A juicio del ex coronel Benítez, esta técnica también conlleva riesgos: "Como es una cápsula de plástico que se lanza, también puede causar daño ocular".

Blackout. Cuando en un mismo lugar se juntan mandatarios importantes y de alto riesgo, se utiliza tecnología que permite bajar las señales de celulares y otros dispositivos electrónicos. "Son inhibidores de señales, que cortan las comunicaciones en zonas donde hay protestas, de tal forma que no haya comunicación vía celular, pero afecta a toda la comunidad porque no se puede elegir a quién se afecta y a quién no, entonces se hace en forma intermitente", agrega Holzmann. Esta también podría ser una tecnología viable, a juicio de Guillermo Benítez, para evitar que un grupo de manifestantes violentos se articulen. "Se usa para evitar las comunicaciones, se baja e inhabilita la señal. Esto puede servir en un sector limitado".

Vehículos. Los zorrillos y guanacos podrán ser reemplazados por vehículos más "livianos y versátiles", según dijo el general Rozas. Benítez analiza que "tiene que seguir siendo blindado, el neumático no puede pincharse, debe ser de caucho duro y blindado no solo contra proyectiles o armamento sino contra el fuego, tanto en carrocería como en pintura, para poder traspasar barricadas. Y ojalá que sea lo más rápido posible, porque los carros actuales tienen muy poco giro de los neumáticos. Si se logra que tenga esto y sea más liviano sería increíble".

Piso resbaloso. En Europa a veces lanzan un líquido viscoso al piso que tiene un efecto disuasor con un efecto disuasor, porque les cuesta mantener el equilibrio, comenta Holzmann. "Los dispersores de agua y deslizantes para mojar superficie de manifestantes más violentos o en ataque, pueden provocar desequilibrio, al igual que los dispersores de agua con químico CS y sustancia adherente en superficies", menciona Ralph Vladimiro como otra táctica utilizada.

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